El individuo en internet, entre la libertad de ser y la opción a escoger

 

 

En internet, estamos entre la libertad de expresión y la censura de contenidos. ¿Por qué?

La realidad nos plantea retos cada vez más potentes, pues somos más completos y vivimos situaciones que requieren re-definir las normas, que durante años nos han servido cuando no sabíamos qué hacer. El cambio consiste en que estamos pasando de una sociedad colectiva, que responde a los criterios de la vida animal, a una sociedad de individuos pensantes, con diversidad de opiniones y una extraordinaria riqueza de expresión. Vamos a ello, es inevitable, por mucho que aparezcan fuerzas que repriman estos cambios, los acabaremos haciendo, y en un tiempo bastante cercano, más de lo que nos imaginamos, pues esa individualidad se está desarrollando tras la apariencia de una sociedad sumisa. ¿Por qué? Porque dicha sumisión es voluntaria, no está obligada por nadie distinto de uno mismo. Y cambiarlo es cuestión de mirar hacia otro lado, algo que está esperando para nosotros sin restricciones de ningún tipo.
Uno de los puntos donde se va a ver reflejado es en el uso de internet, donde ya se están planteando los temas de la libertad de expresión, y la censura de contenidos. Evidentemente, como toda resolución de un conflicto, es fácil encontrarlo en los cambios de valores. Si seguimos tratándonos como colectivo, es necesario tener un moderador que regule el tema para «educar» y controlar a una sociedad que se expresa como animales que empiezan a razonar.

Como individuos traemos una lección a este asunto, que precisamente contribuye a ese cambio en el que estamos ya metidos. La opción a escoger.
El enfoque al aprendizaje acepta cualquier expresión, pues se expone como una opción a conocer otros aspectos. Pero la multiplicidad puede expandirse a niveles insospechados, que no son más que expresiones de lo que podemos hacer. La mente es amplia…y contener sus contenidos puede ser un acto que requiera una estabilidad tremenda.  Es la misma expresión de la información de siempre, la química que hay en las interacciones, expresada a niveles mucho más amplios, que requieren excluir la dualidad moral con la que se han clasificado las cosas durante muchos años. El desarrollo de la mente está trayendo estas necesidades, no pueden reprimirse por mucho que se intente, por ello, es necesario entender los cambios y llevarlos de la manera más favorable.
El conocer está trayendo conflictos con las maneras que hasta ahora hemos usado para funcionar en el día a día. Los cambios requieren avances que, como individuos podemos realizar perfectamente.
Veamos un ejemplo. La libertad de expresión se abre, y todo el mundo puede aportar contenidos, algunos extremos que aportan ideas de destrucción a la sociedad. Esta información está en la mente de alguien, o de muchas personas, forma parte de lo que podemos llegar a ser, de la misma manera que un contenido que aporte desarrollo creativo y que ayude a avanzar notablemente en un campo científico. Ambos parten de la amplitud de lo que somos, visto desde la polaridad bien-mal, se clasifican y son extremos, pero ambos son fruto de un acto de genialidad, de llegar más allá de lo que uno había llegado. Entonces, ese contenido que está ahí de manera libre es observado… Desde una mente evolucionada, cuya parte de su historia es entender dónde podemos llegar, puede sentir lo que está observando en sí mismo, o verlo en otra persona, como si de un espectador se tratara. Vivencia o experiencia. Si queda en planos más mentales, se observa como una experiencia cognitiva. Cuando esto no es así, pasa a la acción, para ser comprendido en la práctica.
Sea lo que sea, cuando se contacta con algo se ha de entender, necesitamos ubicarnos, y ello consiste en tener clasificado todo el contenido informativo, que forma parte de nuestra historia perceptiva. La opción ha de existir si es necesario un aprendizaje, eso está por encima. El que no necesite aprenderlo, no sentirá la atracción de observar. No se trata de si la información genere o no conflicto, pues esto no va a ser problema, los cambios que vienen traen soluciones a estos asuntos.
Es por este motivo que estos cambios van a venir con la evolución.  podemos ser observadores de contenidos si quedan como mero aprendizaje de la historia de nuestro pensamiento, como si fuéramos al museo de la mente. Y es evidente que estamos un poco desfasados unos de otros en el tiempo. Podemos hacer la analogía con una escuela, donde en una misma clase hay alumnos de diferentes cursos, y donde cada vez más predominan los que abarcan más contenidos. La voluntad y el germen del cambio está en todos. Llegados a un punto, el que no se adapte se irá, y como ellos no volverán a haber. Es química, es así.

Posted by Meritxell Castells 6/7/2013

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