El hardware de la conciencia, hacia un nuevo cerebro

 

La evolución de la materia física avanza hacia el añadir la substancia que genera nuestro software futuro. La conciencia. Una palabra muy hablada pero poco conocida cognitivamente. Es la variable de nuestra existencia, que representa a la substancia que se incrementa con la voluntad interactiva, en los niveles más elementales.

La vida como vida es mayormente inconsciente. Pensemos en un animal salvaje, o incluso una célula… Pensemos en el hecho de hasta qué punto son conscientes de sí mismos.
La evolución avanza y vamos siendo conscientes de nuestra cara, nuestra composición de órganos, células, moléculas, átomos…
Somos conscientes de nuestra respiración cuando nos fijamos en ella, pero no lo somos todavía del hígado cuando hace su función, menos de una molécula, y ya no hablo del átomo.
La conciencia se manifiesta en sensitividad, que en la práctica es mayor interacción. Es el contacto más amplio con cada elemento del entorno. La materia es la misma…solo añadimos conciencia que se traduce en llegar a más nivel.
Es por esto que las cosas se re-descubren. Teníamos un modelo y ahora vemos que hay mucho más, y lo cambiamos. Cada movimiento en el conocimiento va a ser así, con cada entrada a niveles de la materia que antes no conocíamos desde la parte consciente.
Los nuevos cuerpos implican cerebros más sensitivos. Un sistema nervioso que impregna más materia, y que es vehículo para la conciencia. Así pues, los nuevos cuerpos simplemente tienen más materia nerviosa. No olvidemos que el cerebro es físico, como otro órgano, pero parte de la base de un mayor número de substancia nerviosa.
Nos dirigimos hacia un aporte de materia nerviosa en más lugares de nuestro físico… Ahora pensad en lo que comporta.
Hay más. Cualquier expresión pasa por los aspectos cantidad y calidad. Conocemos lo que la materia nerviosa aporta en cuanto a la cantidad. Pero es un tejido…en una interacción con una substancia de propiedades y leyes diferentes. La interacción crea una simbiosis que favorece el contacto con niveles más profundos de la materia. Ello supone una vivencia de esos estados. Podemos decir que es el aspecto calidad. Un cerebro capaz d’expresar estados que solo vemos en las bases de la materia.
Empecemos con los estados cuánticos.
El cerebro cuántico se adelanta a la máquina, pues sale de la previsibilidad que esta última es. Se expresa como vivencia en estados que solo se sostienen con un hardware preparado para ello. Por ejemplo en la percepción del tiempo… ¿Adelantarse en el tiempo…o venir del futuro? Depende donde quieras estar. La linea temporal no es más que un punto de referencia donde el observador se sitúa libremente, y la materia le sigue. El desarrollo del cerebro se realiza en el tiempo. Una expresión temporal del cerebro es el comportamiento cuántico, que precisamente implica ausencia de tiempo, pues los tiene todos.
Estos estados se comprenden cuando eres esto. Cuando se vive conscientemente desde estos estados, que implican además un conocimiento más exacto del mundo elemental. Podemos decir que el conocimiento cognitivo en todas sus fases se sostiene. La materia son leyes. Conoces la materia cuando vivencias sus leyes, pues las vives en ti mismo. Es la manera como las percibimos a partir de una cierta expresión como conciencia. Y es así como lo comprenderéis.

Posted by Meritxell Castells 4/8/2013

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