Reconocer las trampas de la evolución permite ubicarnos y tomar decisiones correctas. Saber pensar es una de las herramientas más útiles en este momento.
Decidir sobre la evolución es una tarea que espanta a más de uno por la responsabilidad que supone. Sea por pereza, o por la memoria de una decisión evolutiva incorrecta, o quizá algún prejuicio o cualquier otro capricho de la evolución con el que uno se compromete para llegar a algo.
Saber pensar empieza en una reacción natural de nuestro cuerpo ante la verdad. La verdad resuena, vibra… Sí, ya pero con qué? Y cómo?
En esta charla quiero exponer estas trampas aprovechando para ello la puesta en marcha de nuestras “antenas” en este bello aprendizaje de percibir lo coherente.